Algo que la Iglesia nunca tuvo la intención de ser

Q He visto este patron repetirse una y otra vez. Un predicador y lider talentoso inicia una iglesia pequena con un grupo ajustado de personas creyentes que disfrutan el calido companerismo entre si y estan emocionadas siguiendo a Dios… luego con el correr del tiempo, cuando la asistencia crece, la iglesia empieza a pulir su programa. Pronto, el pastor que tenia los pies en el suelo y era accesible empieza a mejorar vistiendo mejores ropas conforme la asistencia crece, el equipo de adoracion se vuelve mas sofisticado, y luego empieza la recoleccion de fondos para un nuevo edificio.
Cuando el nuevo edificio, sobre el cual todos alaban al Senor, finalmente se termina con su sistema de sonido y amplios salones para el nuevo personal adquirido y los programas, toda esa empresa se transforma en algo que es muy distante a como empezo–y no es mejor, solamente mas lujosa. (Use la palabra ‘empresa’ a proposito). Y el pastor, el cual ya no tiene tiemplo para personalmente orientar y consolar a la gente debido a sus multiples ocupaciones administrativas que el mimo ha formado, empieza a delegar esas tareas a pastores asociados y otras personas. Es como que si todo el enfasis se vuelve en la iglesia y el programa y el brillo… lo que sea.
?Odio asistir a ese lugar! Echo de menos las conversaciones familiares y a las personas que se les hace un nudo en la garganta cuando hablan del Rey Jesus y el dia que lo veremos. ?Que anda mal aqui?
A Hay un resultado muy comun debido a los muchos errores en la filosofia de crecimiento en la Iglesia. Necesitaria mas espacio aqui para poder enumerarlas. Algunas de ellas, como mas grande es mejor, viene al aplicar las normas seculares a los asuntos espirituales. Otras son el resultado de nuestra naturaleza caida. Por ejemplo, la persona promedio recibe un impulso de imagen como parte de algo que parece ser exitoso. Los pastores no son la excepcion. Ellos son juzgados por sus iguales por su apariencia externa, y el crecimiento es lo principal. Pero en mi opinion el crecimiento es el factor mas peligroso en la vida del companerismo cristiano. Produce personas, dinero, y seguridad, todo lo cual le resta valor al proposito triple de la Iglesia. No hay adoracion al Senor, no se estudia Su palabra, ni se produce el companerismo, incluyendo la intimidad y el apoyo de la oracion para las personas creyentes.

Imaginese, si puede, como seria si cada iglesia estuviera compuesta de solamente 10 a 15 familias que pagan el diezmo y de un pastor/profesor que ha sido llamado para que las pastoree. Sus diezmos serian suficiente para mantener al pastor y el mismo nivel economico que ellos disfrutan, y el tendria tiempo para ministrar las necesidades de cada familia, mientras los ayuda a crecer en «gracia y conocimiento de nuestro Senor y Salvador Jesucristo» (2 Pedro 3:18). Tambien habria dinero para poder alquilar un pequeno local para sus reuniones semanales, y ayudar a quienes los rodean. Pero ellos serian una comunidad de fe en el verdadero sentido de la palabra. Cuando empiezan a crecer, su meta seria dividirse y ser dos grupos, los cuales crecerian para ser 4 grupos y asi sucesivamente. No mas mega iglesias, no mas recintos multimillonarios con numerosos empleados y un enorme presupuesto y no mas distracciones por las cosas de este mundo las cuales apartan nuestro enfoque del Reino.

Yo creo que esa fue la intencion del Senor. Por eso es que los grupos pequenos de companerismo siempre tienen mas intimidad y son mas comodos. Es el enemigo el que los hace crecer en algo que la Iglesia nunca tuvo la intencion de ser. El Senor nos advirtio sobre eso mismo en la parabola de la Semilla de Mostaza, mostrando a la Iglesia como una semilla la cual tenia la intencion de convertirse en una pequena planta o arbusto, pero en vez de ello, crecio hasta hacerse un gran arbol, tan grande que las aves del cielo (los ministros de Satanas) podian anidar ahi (Mateo 13:31-32).