Jueves 14 de marzo de 2024
P: Me gusta mucho su sitio web y me siento bendecido todo el tiempo por el mismo… gracias por todo lo que usted hace. Yo sé que usted puede ayudarme en mi pregunta y preocupación. El asunto es que yo amo al Señor con todo mi corazón y mi mente. Siempre he deseado agradarlo a Él. Y oro porque todo lo que haga y diga le dé a Él la gloria.
Mi pregunta es que soy un fumador y parece que no puedo dejar de fumar. He orado para que ÉL me quite la adicción y le oro a Él para que me dé la fuerza para poder hacerlo. Pero todavía fumo… y no quiero hacerlo más porque yo sé que mi cuerpo es templo del Espíritu Santo que habita en mí. Realmente estoy molesto con eso porque sé que lo estoy entristeciendo a Él. Y no quiero estar fumando y perder el Rapto porque yo sé que puede suceder en cualquier momento. Yo quiero complacer a mi Señor en todas las cosas… Por favor ayúdeme con cualquier consejo y por favor ore por mí. Yo oro para estar cerca de mi Padre y Señor Jesús y yo sé que fumar está obstaculizando eso. Gracias por su tiempo y estaré esperando su respuesta.
R: Lo primero y más importante es que, así como fumar es un hábito desagradable que está perjudicando su salud, eso no evitará que usted se vaya en el Rapto si usted es un cristiano nacido de nuevo. Usted es salvo porque usted cree que Jesús ha pagado el precio completo por todos los pecados de su vida, y eso es lo que lo califica para el Rapto.
Segundo, Él quiere ayudarlo a que deje de fumar, y lo hará tan pronto como usted desee hacerlo. Yo creo que la mejor forma para dejar de fumar es dejar un cigarrillo a la vez. Deje de tratar de decir no a todos los cigarrillos futuros, y solamente dígale no al próximo. Para muchas personas fumar es más un hábito que una adicción. Usted formó ese hábito al decidir fumar cada vez que sentía el impulso para hacerlo. Usted puede dejarlo formando el hábito de decir no cada vez que sienta ese impulso. Algunas personas hacen eso sustituyéndolo con otras cosas, y otras simplemente dicen no. Haga lo que sienta que es mejor para usted, pero hágalo de un impulso a la vez. Conforme su cadena de no se alarga sus impulsos serán cada vez menores hasta que se alejan del todo. Santiago 4:7 dice, “Resistan al diablo y éste huirá de ustedes.” Usted puede dejar de fumar de la misma manera.
Cómo el Señor ayuda es dándole la fe para decir el primer no, y aumentar su fe con cada no sucesivo. Entonces, antes de empezar, pida la fe para decir no. Usted sabe que es Su voluntad para que usted haga eso. Él está aguardando a que usted tome el primer paso.
Si usted resbala y no puede resistir un impulso particular, simplemente pídale a Él que aumente su fe para decirle no al siguiente impulso, y empiece de nuevo. Pronto usted le estará diciendo no a todos ellos.
Muchas personas, incluyéndome yo, han dejado de fumar de esa manera. Y yo sé que usted va a poder hacerlo también.
Para mayor información de cómo romper malos hábitos, lea La Ley del Desplazamiento [https://gracethrufaith.com/es/estudios-biblicos-en-espanol/la-ley-del-desplazamiento/]