Viernes 18 de noviembre de 2022
P: Algunas veces me encuentro ruborizado por la codicia: Financieramente tengo más que suficiente y he llegado a una edad avanzada y sana. Sin embargo parece que tengo la idea de que “si tengo más podría contribuir más en la obra de Dios.” A pesar de ello, según los estándares de dar, yo doy más que solamente un diezmo. Quiero decir mucho más. ¿Tiene algunas sugerencias de qué es lo que hay malo en mí? ¿Es solamente una actitud mundana? ¡Dios no permita que una persona mayor sea culpable de eso!
R: La codicia implica que usted esté tratando de obtener más para satisfacer sus propios intereses egoístas. A usted le gustaría tener más para poder dar más. No hay nada malo en eso. De hecho, usted es un buen ejemplo de la promesa de Pablo en 2 Corintios 9:11. “Ustedes serán enriquecidos en todo sentido para que en toda ocasión puedan ser generosos.” Manténgase siendo un dador generoso y el Señor lo bendecirá con más para que pueda dar más.