Martes 13 de febrero de 2024
P: El año pasado, tuve una relación que realmente lamento. Incluso hasta el día de hoy, no sé si he perdonado completamente a mi exnovio en mi corazón. Todavía siento enojo y arrepentimiento cada vez que lo veo. Cuando reflexiono sobre mí misma, me disgusta que no soy mejor y soy tan pecadora como él. Debido a que esta relación me llevó a tanto pecado, me siento muy lejos de Jesús. Todavía siento dolor y desgracia cada vez que lo pienso. Pero quiero perdonarlo porque quiero ser perdonada por Dios. ¿Qué puedo hacer?
R: Primero, comprenda que se enoja estar cerca de él porque no podemos recordar una experiencia dolorosa sin recordar también los sentimientos que la acompañan. Cuando usted lo ve, le recuerda la experiencia y revive el dolor asociado con ella. Y se enoja de nuevo. Una vez que lo haya perdonado, la ira y el dolor comenzarán a disminuir y eventualmente desaparecerán por completo.
El perdón es a menudo una opción “contraria a los sentimientos”. Eso significa que usted lo hace por obediencia al Señor, incluso si no tiene ganas de hacerlo. Pero si conscientemente usted refuerza su elección de perdonar a su ex cuando está enojada, sus sentimientos eventualmente se alinearán con su elección, y entonces sabrá que realmente lo ha perdonado. Puede acelerar el proceso haciendo lo siguiente. 1) Pídale a Dios que la ayude a perdonarlo. 2) Pídele a Dios que la perdone por su ira. 3) Pídale a Dios que la perdone por su comportamiento.
Usted no necesita confiar en él y tampoco no debe estar cerca de él hasta que pueda hacerlo sin reaccionar. En cuanto a sus pecados, Jesús ya la ha perdonado por todos ellos (Colosenses 2:13-14). La culpa que todavía siente proviene del enemigo, tratando de hacerla sentir miserable. Resístalo y huirá de usted (Santiago 4:7). Usted hace eso al personarse a usted misma. Pídale ayuda a Dios con eso también.