Q Tengo una relacion muy intima con el Senor. Con frecuencia le pido que escudrine mi corazon y mire si hay algo malo en mi. Yo deseo que El revele actitudes o deseos que necesitan ser cambiados.
Ultimamente parece que pensamientos de naturaleza mala saltan en mi mente, como tener una excusa infantil o decir una mentira sobre algo pequeno como por que llegue tarde. De inmediato reconozco que eso es un mal pensamiento y renuncio al mismo. Han sido anos desde que senti que tenia que tener excusas cuando me equivoco. Tratando con ese tipo de situaciones honestamente y pedir perdon ha demostrado ser una bendicion. Pero me preocupa y estoy pensando por que eso de un momento a otro esto es un problema para mi.
Ultimamente parece que pensamientos de naturaleza mala saltan en mi mente, como tener una excusa infantil o decir una mentira sobre algo pequeno como por que llegue tarde. De inmediato reconozco que eso es un mal pensamiento y renuncio al mismo. Han sido anos desde que senti que tenia que tener excusas cuando me equivoco. Tratando con ese tipo de situaciones honestamente y pedir perdon ha demostrado ser una bendicion. Pero me preocupa y estoy pensando por que eso de un momento a otro esto es un problema para mi.
A Satanas puede plantar pensamientos en nuestras mentes como una forma de ataque, tratando de hacernos pecar. Esos pensamientos pueden ser cualquiera de las cosas normales como el enojo, la codicia, la envidia, etc., hasta pensamientos de una naturaleza mas siniestra. Esos pensamientos no son pecados si no los aceptamos y de manera consciente empezamos a actuar sobre ellos. En 2 Corintios 10:3-5 Pablo nos da las herramientas para prevenir que esos pensamientos se vuelvan pecados.
Es verdad que aun somos seres humanos, pero no luchamos como los seres humanos. Las armas con las que luchamos no son las de este mundo, sino las poderosas armas de Dios, capaces de destruir fortalezas y de desbaratar argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y de llevar cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.