Q Yo estaba casada con una persona incredula la cual despues de muchos anos de matrimonio prefirio dejar el matrimonio basandose en nuestras diferencias. Yo no permitia ciertos comportamientos en nuestro hogar, como drogas, alcoholismo y otras actividades ilegales, por mi seguridad y la de mi hijo. El le atribuyo esa resistencia a mi fe (sin mencionar que lo que hacia era ilegal) y me dijo que ya no era divertida. El no queria vivir con las reglas y la etica que yo necesitaba y por las cuales vivia, y aun me sentia juzgada a pesar que no lo era, porque le pedi que mantuviera esas cosas fuera de nuestro hogar. Fuimos a sesiones de consejeria con un consejero cristiano el cual se reunio con nosotros dos y tambien de manera individual, el cual eventualmente me dijo que nuestro matrimonio estaba terminado porque mi esposo ya no tenia ningun deseo de ser mi esposo ni renunciar a las cosas que estaban deshaciendo nuestro matrimonio, mi amor por el, mi confianza en el y mi respeto para el. Permanecimos separados durante 4 anos antes de iniciar el proceso de divorcio y hoy en dia estamos en buenos terminos y el respeta mi fe como mia, a pesar de que no quiere tener nada que ver con eso.
El consejero matrimonial me dijo que mi divorcio estaba permitido por 1 Corintios 7:15, y que si yo volvia a casarme, no seria tomado como adulterio (Mateo 5:30-31).
?Puedo tener su opinion sobre este veredicto? He conocido a un gran hombre en quien estoy interesada, pero a el tambien le gustaria tener mas aclaraciones sobre eso ya que el es una persona cristiana y no hubo ninguna infidelidad en mi matrimonio que me guiara al divorcio.
A Estoy de acuerdo con su consejero matrimonial. En
Mateo 5 Jesus les daba instrucciones a quienes vivian bajo la Ley de lo completamente equivocados que estaban en sus obligaciones. Estar enojados con un hermano los hace culpables de asesinato, los pensamientos de lujuria los hacia culpables de adulterio, etc. En el mismo contexto, El les hizo saber que no podian divorciarse con tan solo darles a sus esposas una carta de divorcio. Era necesaria la base de la infidelidad matrimonial.
Pero aun la Ley incluia diferentes responsabilidades para los hombres que se casaban fuera de la religion. La disolucion de esas uniones era muy diferente (Deuteronomio 21:10-14).
En 1 Corintios 7:15 Pablo escribio acerca de una persona incredula que queria terminar su matrimonio por motivos religioso. El dijo que la persona creyente no podia iniciar el divorcio, pero si la parte incredula lo hacia, no debia oponerse a ello. El requisito del adulterio no se aplica en estos casos.
La razon para estos estandares diferentes es que Dios nunca quiso que Su pueblo se casara con personas incredulas, pero cuando personas creyentes se casan, el quiere que permanezcan de esa manera. El matrimonio entre personas creyentes es un modelo mistico de Cristo y la Iglesia y tiene la intencion de mostrar que Jesus nunca nos dejara ni nos abandonara.