Jueves 4 de abril de 2019.
P: No soy católico, pero tengo serias inquietudes para testificarle a un amigo católico sobre el tema del bautismo de bebés y la enseñanza católica de bebés que se van al infierno cuando mueren si no han sido bautizados. Quiero presentar un hecho basado en la Biblia cuando le testifique.
R: Los católicos creen en el concepto del pecado original, que todos nacemos con el pecado de Adán. Si ese pecado no se limpia en el bautismo infantil, entonces si el bebé muere, se va al infierno.
Este no es un concepto bíblico. Mateo 18:10 dice que cada pequeño tiene un ángel guardián que siempre está en la presencia del Padre. Esto no sería verdad para un condenado.
En Romanos 7:9, Pablo escribió que cuando era un niño antes de alcanzar la edad del uso de la razón, tenía vida eterna. Cuando alcanzó la edad del uso de la razón, la perdió. Continuó diciendo que, a partir de ese momento, nada de lo que pudiera hacer por sí mismo podría devolverle la vida eterna. Solo la muerte sustitutiva del Señor podría lograr eso.
El bautismo infantil se podría considerar realmente como una ceremonia de dedicación. No produce la salvación ni tampoco la limpieza del pecado. Es cuando los padres dedican su hijo o hija a Dios y es una adaptación de la circuncisión judía pero sin derramamiento de sangre.