Miércoles 8 de noviembre de 2023
P: Mi tío de 90 años de edad, quien no es creyente, está sintiendo el jalón de Dios por las oraciones. Él no ha estado abierto a una conversación espiritual. Sin embargo, debido a muchos problemas de salud, recientemente cuestionó la existencia del Cielo. ¿Qué escrituras ayudarían a convencerlo de la realidad del Cielo?
R: Yo creo que los versículos más claros tienen que ver con el concepto de la vida eterna. Jesús les prometió eso a los creyentes varias veces durante Su ministerio en lugares como Juan 3:16, Juan 6:40 y Juan 11:25-26.
Pablo escribió que al morir, los espíritus de las personas creyentes dejan sus cuerpos muertos y van directamente a estar con el Señor. Él explicó eso en 2 Corintios 5:6-9 y Filipenses 1:21-24.
Pablo también dijo que los espíritus de estos creyentes van a recibir cuerpos nuevos que son inmortales en la resurrección. Estos son los cuerpos en los que van a vivir eternamente con Dios. 1 Tesalonicenses 4:16-17 y 1 Corintios 15:51-53 explican que eso va a suceder al mismo tiempo que las personas creyentes son cambiadas de mortales a inmortales sin pasar por la muerte. Juntos, todos van a vivir para siempre con el Señor. Jesús también habló de esto en Juan 14:1-3 en donde Él dijo que iba a la casa de Su Padre a prepararnos un lugar, y volvería para llevarnos allá.
Viéndolo como un todo, estos pasajes de las Escrituras muestran que las personas creyentes no tienen que tener ningún temor a la muerte, sino más bien pueden ver que adelante nos aguarda una vida mejor, una que durará para siempre.