¿Fue el agua?

Q La Biblia no es especifica en esto, pero cuando Jesus camino sobre el agua (Juan 6:19), ?supone usted que El le hablo al agua y le ordeno que se solidificara bajo Sus pies, o cree usted que el agua automaticamente sabia que tenia que solidificarse bajo los pies de Dios para permitirle cruzar al otro lado?
A Yo escuche a un «teologo» explicar que debio haber habido una condicion climatica inusual en el mar de Galilea esa noche la cual causo que una porcion de agua debajo de los pies del Senor se congelara cuando El empezo a caminar en direccion de la barca de los discipulos. El especulo que Jesus se paro sobre esa porcion de agua congelada y se dio cuenta que era lo suficientemente solida para sostenerlo. Sin remos ni vela, El se las agencio para maniobrar en contra del viento a la mitad del lago para llegar justo al costado de la barca de los discipulos, permitiendole asi a Pedro saltar de la barca y caminar sobre el hielo hacia El.

Pero como Pedro lo demostro al caminar primero y luego hundirse en el agua, eso no pudo ser algo que el agua hizo. Recuerde, el Senor reprendio a Pedro por su falta de fe (Mateo 14:28-31). El no reprendio al agua por haber dejado que Pedro se hundiera.

La explicacion mas simple es que utilizando el poder del Espiritu Santo, Jesus le ordeno al agua que lo sostuviera a El. Pedro, al ver que el agua sostenia al Senor y oyendo Su llamado a ir a El, salto de la barca en fe. Tan pronto como su enfoque estaba en el Senor y solamente en El Pedro pudo hacer lo imposible. Pero cuando el se distrajo por el viento y perdio su enfoque en el Senor empezo a hundirse. El Senor de inmediato estaba a su lado para salvarlo.

Esta es una buena leccion para todos nosotros y confirma que cuando Pablo dijo, «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece» (Filipenses 4:13) no estaba exagerando. Mientras que nuestra mirada este en el Senor y solamente en El nosotros podemos hacer lo imposible. Pero si permitimos que las cosas del mundo nos distraigan, podemos sufrir un lapso de fe y caer cuan largos somos. Aun entonces, el Senor de inmediato estara alli para salvarnos.

«Si estoy de pie, dejame estar de pie sobre la promesa de que Tu me haras cruzar, y si no puedo, permiteme caer sobre la gracia que primeramente me trajo a Ti» (Rich Mullins).