¿Incrédulos salvos?

Q

Martes 7 de diciembre de 2021

P: He estado casada durante 7 ½ años y amo mucho a mi esposo. Yo soy creyente pero él no. Le he presentado los hechos y le he mostrado las escrituras en la biblia para respaldar eso. Él solamente cree que Jesús fue un buen hombre y que inició una de las muchas religiones que se practican hoy en día. Él cree que cuando nosotros como personas cristianas le decimos a alguien que Jesús es el único camino a la salvación, eso es discriminatorio en contra de las otras religiones. Hemos tenido muchas discusiones encendidas en referencia a este tema. Me rompe el corazón saber que su alma está en juego y oro para que el Señor un día abra su corazón.

Yo atendí un foro cristiano buscando asistencia para poder ayudar a que mi esposo entendiera y me dijeron que no me preocupara porque siendo yo una persona creyente, mi esposo y mi casa están cubiertos. Esto no me convence. Mis hijos tienen 6 y 4 años y son demasiado jóvenes para entender al no haber alcanzado todavía la edad del uso de la razón, pero que mi esposo esté cubierto, no podía ser hasta que fui referida a 1 Corintios 7:13-16.

“Y si el esposo de alguna hermana no es creyente, pero él consiente en vivir con ella, tampoco ésta debe abandonarlo. Porque el esposo no creyente es santificado en su esposa, y la esposa no creyente es santificada en su esposo. Si así no fuera, los hijos de ustedes serían impuros, mientras que ahora son santos.” RVC

Yo leo la Biblia de manera literal, pero con este versículo estoy teniendo problemas si lo debo tomar de manera literal o no. Encuentro difícil poder creer que mi esposo sea raptado o sea santificado porque yo soy una persona creyente. ¿Me podía explicar esta escritura? ¡Gracias, de nuevo!

A

R: Yo nunca he oído de algún teólogo respetable que afirme que este versículo afecta el estado eterno del cónyuge incrédulo. La interpretación más común es que se aplica al matrimonio y a cualquier hijo del mismo.

Al aplicarlo al matrimonio quiero decir que ante los ojos de Dios el cónyuge creyente en efecto hace legítimo el matrimonio en nombre de la parte incrédula. Tito 1:15 dice, “Para los puros, todas las cosas son puras; pero para los corruptos e incrédulos nada es puro.” El cónyuge creyente no está en adulterio ni en fornicación al permanecer en una relación íntima con la parte incrédula.

Y los hijos no son ilegítimos a los ojos de Dios, al estar similarmente cubiertos por el padre/madre creyente.

Pablo escribió eso para asegurarle al cónyuge creyente que está bien permanecer en una relación con la otra parte. Pero nada de eso tiene la intención de producirle algún beneficio a la persona incrédula. Obtener la salvación y la vida eterna con Dios solamente puede hacerla el cónyuge incrédulo en la base de una decisión personal para aceptar a Jesús como Señor y Salvador, igual como el resto de nosotros lo hizo.