Martes 10 de diciembre de 2024
P: Siempre pensé que Dios conoce el fin desde el principio y conoce todas las decisiones que tomaremos en nuestras vidas, entonces, ¿cómo cambia la oración las cosas? ¿Hay escrituras que apoyen esta idea? Quiero orar con eficacia por mi familia y amigos necesitados.
R: Si Dios conoce el fin desde el principio, entonces Él también sabe qué oraciones haremos antes de hacerlas. Ninguna de ellas lo sorprende o lo toma desprevenido porque Él no solo ve las cosas como suceden, sino que sabe de antemano cómo y cuándo sucederán y ya las ha tomado en consideración.
La evidencia de que la oración cambia las cosas aparece en toda la Biblia. Moisés oró y el mar Rojo se partió (Éxodo 14:15-16). Elías oró y descendió fuego del cielo (1 Reyes 18:36-38). Los discípulos oraron y la gente fue sanada (Hechos 4:12-16). La gente oró y los discípulos fueron liberados de la prisión (Hechos 12:1-17). Cada uno de nosotros oró y el Señor nos salvó del castigo de nuestros pecados y nos dio vida eterna con Él.
En cuanto a las promesas, Jesús dijo que si permanecemos en Él, podemos pedir lo que queramos y se nos dará (Juan 15:7). Pablo dijo que no debemos estar ansiosos por nada, sino en cada situación, con oración y petición, y con acción de gracias, presentemos nuestras peticiones a Dios (Filipenses 4:6). Santiago dijo que la oración de una persona justa es poderosa y eficaz (Santiago 5:16). Pedro dijo que los ojos del Señor están puestos en los justos y sus oídos están atentos a su oración (1 Pedro 3:12).
La oración es la acción más básica de nuestra fe. Es el medio por el cual nos comunicamos con Dios.