Malentendidos acerca de la salvación

Q La semana pasada cuando leia la Biblia me encontre con un par de versiculos que me erizaron la piel y me gustaria tener su opinion al respecto.

Mateo 7:21-23. «No todo el que me dice: Senor, Senor, entrara en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que esta en los cielos. Muchos me diran en aquel dia: Senor, Senor, ?no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declarare: Nunca los conoci; apartense de mi, hacedores de maldad.»

No se si puedo pensar en algo mas terrible que llegar al dia del juicio final para que el Senor me diga, «apartate de mi, nunca te conoci.» Despues de pensarlo un poco he llegado a la conclusion de que simplemente aceptando a Cristo y que El murio por mis pecados NO es suficiente. No quiero decir que las obras son requeridas excepto UNA cosa ademas de tener fe–ARREPENTIRSE. Los poderes de la oscuridad conocen quien es Jesus y creen en El y saben que a traves de Cristo los pecados de la gente son perdonados. La diferencia esta en que ellos nunca tuvieron la intencion de arrepentirse. No quiero parecer como un pesimista de primera pero eso esta empezando a molestarme un poco, lo cual asumo que es algo bueno porque significa que el Espiritu Santo esta haciendo alguna conviccion en mi corazon. Pero ?Que entiende usted que estos pasajes significan?

A Antes de mirar Mateo 7:21 vayamos a los versiculos que mas claramente explican la voluntad de Dios en cuanto a nuestra salvacion se refiere. Juan 6:28-29 nos dice que la obra que el Padre requiere de nosotros es que creamos en el que El envio. Juan 6:40 dice, «Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en el, tenga vida eterna; y yo le resucitare en el dia postrero.» Y Efesios 1:13-14 nos dice que fuimos incluidos en Cristo cuando oimos el evangelio de nuestra salvacion y creimos en el. En ese momento se nos dio el sello del Espiritu Santo como un deposito que garantiza nuestra salvacion. No se menciona ningun otro requisito en estos ni en ninguna otra declaracion concerniente a nuestra salvacion. No tome mi palabra sobre ello. Verifique Mateo 7:7-8, Juan 3:16, Juan 6:38-40, Romanos 10:9, Romanos 10:13, 2 Corintios 1:21-22, Tito 3:4-7 para que este seguro.

Anadale a todo esto el hecho de que la palabra griega traducida arrepentirse significa cambiar de manera de pensar. Antes de que usted pueda ser salvo, tiene que cambiar su manera de pensar acerca de su condicion espiritual y estar de acuerdo en que es un pecador que necesita un Salvador. Cuando la Biblia dice arrepientanse y bauticense, como en Hechos 2:38, no significa que cambiemos nuestro comportamiento para probar que somos dignos de la salvacion, sino que significa que cambiemos nuestra manera de pensar y admitamos que necesitamos un Salvador.

En Mateo 7:21-23 Jesus estaba terminando una ensenanza acerca de los falsos profetas que habia empezado en Mateo 7:15. El dijo que solo porque le decian Senor no significa que entrarian en el Reino aun si ellos declaraban haber hecho milagros en Su nombre. El los llamara hacedores de maldad y negara que nunca los conociera. Estos versiculos no tenian la intencion de tener una aplicacion generalizada. Estan relacionados con los fasos profetas que estan entre nosotros.

En cuanto a Santiago 2:19 tan frecuentemente mal citado, lo que realmente dice es, «Tu crees que Dios es uno; bien haces. Tambien los demonios creen, y tiemblan.» No hay ninguna mencion de Jesus aqui, o sobre que es lo que se necesita para ser uno salvo. Santiago discutia que la fe salvadora se manifestara eventualmente en el deseo de ayudar a otras personas. La razon por la que los demonios tiemblan es que mientras saben que solamente hay un Dios, no han estado dispuestos a humillarse a si mismos y admitir que necesitan un Salvador. Por consiguiente, solo les queda esperar Su juicio.

Una y otra vez, La Biblia dice que creer en la muerte expiatoria del Senor y aceptarla en fe como pago por nuestros pecados es el unico requisito para la salvacion. Nuestra fe en eso es lo que se nos acredita como justicia (Romanos 4:5).