Jueves 16 de mayo de 2024
P: Yo no sé acerca de usted, pero yo creo que voy a ser la única persona cristiana sin ninguna corona. No sé si en algún momento he hecho algo que no haya sido por algún motivo egoísta escondido. Aun cuando pienso que no soy egoísta, solamente con pensarlo de un momento a otro se arruinan las cosas. Yo creo que estaré agradecido al final con solamente estar con el Señor. Esa será mi recompensa. No tener pecado y estar con Él en sí mismos es una recompensa. ¡¡No puedo esperar!!
R: Usted es como el resto de nosotros. Yo creo que lo que consideramos como nuestros mejores logros será quemado en el fuego, y las cosas que ni siquiera recordamos haber hecho nos harán ganar coronas. Recuerde, 1 Corintios 4:5 dice,
“Así que no juzguen ustedes nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual sacará a la luz lo que esté escondido y pondrá al descubierto las intenciones de los corazones. Entonces Dios le dará a cada uno la alabanza que merezca.”
Esto se aplica también a la manera como nos juzgamos a nosotros mismos. Y por favor note la frase “cada uno.” Cada uno de nosotros recibirá su alabanza de parte de Dios. No dice “algunos” o “muchos” ni siquiera “la mayoría”, sino “cada uno.” Yo entiendo eso como que el Señor va a encontrar algo bueno en cada uno de nosotros.