¡Más trabajo, o más fe?

Q

Martes 30 de noviembre de 2021

P: En el capítulo 5 del Evangelio según Mateo, Jesús estaba explicando los pecados físicos del adulterio, asesinato, etc. Luego él explicó que aún si una persona piensa eso en su corazón ya ha cometido esos pecados. ¿Estaba Jesús enseñándonos a vivir con más pureza, o estaba enseñándonos que es imposible vivir una vida sin pecado y que necesitamos un salvador?

A

R: El propósito de la enseñanza de Jesús en Mateo 5:17-48 era para mostrar que la Ley de Dios siempre será la norma con la cual nuestra justicia, nuestra aceptación a Dios, será determinada.

Él dijo que para poder entrar en el Reino de los Cielos debemos tener una justicia mayor a la de los fariseos (Mateo 5:20). Esas personas tenían una obsesión acerca de cumplir la Ley, aún en los detalles más minuciosos, y eran mejores en ello que el resto de la gente.

Después de dar ejemplos para mostrar que Dios no nos juzga por nuestras acciones solamente, sino también por los motivos de nuestro corazón, Él terminó diciendo que tenemos que ser perfectos como Dios es perfecto (Mateo 5:48).

Su punto era que aun haciendo lo mejor que podemos, no podremos cumplir con las normas de Dios para entrar en el Reino, porque por nosotros mismos nunca podremos ser perfectos como Dios lo es. Un solo pensamiento nos condenará.

Más tarde Pablo escribió que la justicia de Dios, aparte de la Ley, se ha dado a conocer. Esa justicia viene por medio de la fe en Jesucristo para todos los que creen (Romanos 3:21-22). En otras palabras, debido a nuestra fe en la muerte del Señor la cual pagó por todos nuestros pecados, es que podemos cumplir con las normas de Dios después de todo, porque cuando Jesús ofreció por una sola vez un sacrificio por los pecados, Él hizo perfectos para siempre a los santificados (Hebreos 10:12-14).