Jueves 20 de mayo de 2021
P: He sido miembro de mi iglesia Bautista del Sur durante 18 años desde que me trasladé de mi ciudad natal. Con el correr de los años hemos crecido de 700 personas a un promedio actual de 3.500. Tenemos dos servicios de adoración, uno tradicional con una mezcla de himnos tradicionales y de alabanza. El segundo servicio es completamente contemporáneo con una banda que incluye guitarras eléctricas, tambores, bajos, etc. Yo crecí amando grupos musicales como Clapton, los Hermanos Alman, etc. Así que no es que no me guste la música rock. Mi pregunta se relaciona con la adoración con música contemporánea.
Ayer yo asistí a un servicio con música contemporánea porque mi hija está en el último año del colegio y se le hacía un reconocimiento durante el servicio. Cuando el servicio empezó, sentí un rechazo. El volumen estaba muy alto y las palabras parecían repetitivas e iban en aumento. La música vibraba en mis huesos. Me sentí en un concierto de rock solamente que estaba en la iglesia. Yo sé que hay muchas iglesias que se están moviendo hacia un estilo de música más contemporáneo para invitar a más personas a que asistan. Yo lo entiendo, pero no estoy seguro que eso esté de acuerdo a la marca que yo me impuse como un estándar para mi vida. ¿Me podría ofrecer algún estudio, o ayudarme a saber lo que dice Dios sobre eso? He leído mucho acerca de la adoración, pero este estilo de música rock tan sonora en la iglesia me preocupa.
R: Toda la música cuando se escribió, fue contemporánea. A mí me gusta alguna de la música antigua más que algo de eso nuevo, probablemente porque así fue cómo yo crecí, pero la adoración con música acústica es mi favorita.
El Salmo 100 dice que debemos cantar alegres al Señor y llegar con gozo ante Su presencia. Algunas veces yo pienso qué pensaríamos acerca de la música de David si pudiéramos escucharla hoy. Me atrevo a decir que todavía nos gustaría más la música que conocemos mejor. Si a usted no le gusta la música contemporánea, déjela para las personas que sí les gusta.