Viernes, 12 de junio de 2020
P: He leído aquí y allá en algunas de sus respuestas (la más reciente es: ¿Me equivoco al estar enojado?) que podemos pedirle a Dios que perdone el pecado de otra persona? ¿Podría decirme dónde se encuentra eso en la Biblia? Me resulta difícil comprender que puedo pedirle esto a Dios y que Él perdonará el pecado de la otra persona, aunque ella no se haya arrepentido. ¿Y si no es creyente? ¿Puedo preguntar y cómo es que eso funciona?
R: 1 Juan 5:16-17 dice,
“Si alguno ve a su hermano cometer un pecado que no lleva a la muerte, ore por él y Dios le dará vida. Me refiero a quien comete un pecado que no lleva a la muerte. Hay un pecado que sí lleva a la muerte, y en ese caso no digo que se ore por él. Toda maldad es pecado, pero hay pecado que no lleva a la muerte.”
Observe que Juan dijo: “Si alguno ve a su hermano…” Para las personas creyentes, el pecado no causa la muerte. Todos los pecados de nuestra vida han sido pagados. En última instancia, el único pecado que conduce a la muerte es el pecado de rechazar el perdón que Jesús compró para nosotros con Su vida. No es que Dios se niegue a perdonar ese pecado, sino que no puede, porque la persona ha rechazado la única provisión que Dios ha hecho por nuestros pecados.
Debemos alegrarnos cuando se perdona a una persona creyente, como nosotros nos regocijamos cuando alguien nace de nuevo. Pedirle a Dios que perdone los pecados de una persona creyente es una manera de cumplir el mandamiento del Señor de amarnos los unos a los otros como Él nos amó. (Juan 13:34)
En lo que respecta a las personas no creyentes, Jesús nos dijo que oráramos por ellas también. Él le pidió a Dios que perdonara a los que los crucificaron (Lucas 23:34). Y Esteban le pidió a Dios que perdonara a los que lo estaban apedreando (Hechos 7:60). He descubierto que pedirle a Dios que perdone a las personas que me han hecho daño siempre me ha ayudado a superar mi ira y encontrar la paz de nuevo.