Miércoles 23 de noviembre de 2022
P: Soy un cristiano nacido de nuevo. Yo sé esto. Pero hace un tiempo (e incluso ahora ocasionalmente) tuve serias dudas. Hubo un momento en que carecía de fe y parecía que todo estaba perdido. Quería creer, pero simplemente no podía. Leía la Biblia y eso me ayudaba, pero luego tenía una sensación de desesperanza y creía que eso volvería a ser imposible. Llegó un punto en el que pedí señales de que Él era real y Él me contestó por medio de una llamada desconocida en mi teléfono poco después de haberla hecho. Luego, un mensaje de texto que decía que Jesús nunca falla, y finalmente, de la nada, una amiga me envió un mensaje de texto porque sentía que algo andaba mal. He leído que una vez que uno ha sido salvo, nada puede cambiarlo, pero ¿y uno? ¿Qué pasa si uno decide que ya no cree? ¿Puede uno volver? El hijo pródigo explica que el hijo vuelve en sí y le ruega a su padre, pero el hijo nunca olvidó al padre.
R: Hay varios versículos que responden a su pregunta en términos ciertos. Juan 6:39 dice que es la voluntad de Dios que Jesús no pierda a ninguno de todos los que se le han dado. 2 Corintios 1:21-22 dice que Dios ha aceptado la responsabilidad de mantenernos salvos. Él es quien nos hace estar de pie. Puso su sello de propiedad sobre nosotros y su Espíritu en nosotros como garantía.
¿Recuerda cuán claramente Jesús usó la analogía de las ovejas y el pastor para referirse a Su relación con nosotros? Las ovejas son propensas a perderse, pero cuando lo hacen, es tarea del pastor traerlas de regreso. Juan 10:27-30 lo explica muy bien. Nadie puede alejarlo de Él, ni siquiera usted mismo. Romanos 8:38-39 dice que nada en toda la creación puede separarlo de Su amor. Eso también lo incluye a usted.