Miércoles 25 de mayo de 2022
P: He estado leyendo su blog por un año ya y lo disfruto mucho. Me interesaría mucho conocer su opinión acerca de las iglesias en casa. He leído varios libros populares sobre las iglesias en casa y siento que el Espíritu Santo me está diciendo que lo que estoy leyendo es bueno y es cierto. ¿Le gustaría comentar?
R: No puedo comentar sobre los libros que usted ha leído, pero sí puedo decir que la Iglesia empezó a reunirse en casas, y no creo que el Señor jamás tuvo la intención de que eso fuera diferente. La idea de que una iglesia sea un gran edificio con un pastor a sueldo y una congregación, es una fabricación humana.
En mi opinión, el fenómeno de la mega-iglesia es más una función económica que teológica. En otras palabras, estas generan grandes cantidades de ingresos y nutren nuestra mentalidad de “el éxito de los números”. Pero no me importa cuántas personas profesionales pertenecen a la planilla ni cuántos programas se ofrecen, usted no puede tener una vida cristiana con sentido espiritual con 10 o 20 mil personas.
Entonces, ¿qué es lo que las mega-iglesias hacen para satisfacer las necesidades espirituales de su gente? Empiezan a formar un montón de grupos pequeños dirigidos por algún voluntario y se reúnen en la casa de alguna persona. Allí es donde el verdadero trabajo de la Iglesia es hecho, tal y como se hacía al principio.