¿Salud y riqueza?

Q Tengo una amiga que esta muy involucrada en una iglesia que ensena que por fe «Usted sera rico.» Ella dice que si tiene suficiente fe Dios le va a suplir a su familia con todo lo que necesita. Por favor muestreme escrituras que ensenan que Dios realmente quiere que las personas trabajen para ganarse la vida. Mi amiga y su esposo no han trabajado durante anos y el trabajo que han tenido en el pasado ha sido trabajo propio. No pueden mantener a sus hijos, pero no escuchan ni a amigos ni a familiares. Ellos estan en sus cuarentas, asi que esto no es un asunto de ser «joven y estupido.»
A El problema con el evangelio de la prosperidad como se predica comunmente es que se enfoca en el ser humano en lugar de Dios. Fomenta el materialismo y la avaricia al ensenarle a la gente que si dan un poco se les devolvera mucho. Eso es lo opuesto a lo que la Biblia ensena.

Jesus si prometio que si buscamos primero Su Reino y Su justicia, Dios a cambio vera que nuestras necesidades sean satisfechas (Mateo 6:31-34).

El tambien dijo que si damos se nos dara (Lucas 6:38) y que no debemos acumular cosas aqui, sino para ser usadas para el Reino (Mateo 6:19-21).

Pablo escribio que asi como sembramos vamos a cosechar (2 Corintios 9:6). El dijo que seremos ricos en todo para poder ser generosos en cada ocasion (1 Corintios 9:11).

Todos esos versiculos nos advierten usar lo que se nos ha dado para el Reino y no tratar de enriquecernos nosotros mismos, sino confiar en El para todo.

Pablo tambien escribio que quienes no trabajan no deben esperar depender de la Iglesia para alimentarse (2 Tesalonicenses 3:10), y que un ser humano que no cuida a su propia familia es peor que un incredulo (1 Timoteo 5:8).

Si sus amigos estan esperando que Dios les de una mano, estaran esperando durante mucho tiempo. Es mejor que ellos busquen la direccion del Senor para una forma de ganar algun dinero. Entonces podran poner las promesas mencionadas anteriormente a trabajar y asi recibir las bendiciones para ellos mismos mientras estan acumulando tesoros en el Cielo al mismo tiempo. Ese es el verdadero evangelio de la prosperidad.