Miércoles 27 de septiembre de 2023
P: ¿Es cierto que solo se necesita una pequeña cantidad de fe en el Señor para ser uno salvo y salva, o se necesita mucho? La Biblia habla de la fe del tamaño de una semilla de mostaza, pero también escuché que uno necesita creer con todo su corazón. ¿Qué pasa si una persona definitivamente quiere ser salva, pero no cree que tiene la fe que necesita?
R: Cuando los israelitas estaban en el desierto, Dios les envió pan del cielo, al que llamaron maná, y los envió a recogerlo. Algunos recogieron mucho, mientras que otros solo recogieron un poco. Pero cuando midieron cuánto habían recogido, descubrieron que todos tenían exactamente lo que necesitaban (Éxodo 16:17).
Más tarde, Jesús dijo que el pan del cielo tenía la intención de representarlo a él (Juan 6:32-35). Para mí, eso dice que todos los que piden Su salvación obtienen exactamente la cantidad correcta de fe que necesitan para creer y recibirla.
Así es como eso funciona:
Pablo dijo que somos salvos por gracia mediante la fe, y la fe es un regalo de Dios (Efesios 2: 8-9).
El tamaño del regalo que nos da está determinado por la cantidad de fe que necesitamos para creer que Él murió por nuestros pecados y resucitó. Algunas personas necesitan un poco, otros necesitan mucho, pero todos obtenemos todo lo que necesitamos.
Es por ello que Jesús pudo decir: “Pidan, y se les dará, busquen, y encontrarán, llamen, y se les abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre” (Mateo 7:7-8).
También es cómo Pablo pudo decir: “Todos los que invoquen el nombre del Señor serán salvos” (Romanos 10:13).
Es una promesa directa de la palabra de Dios, establecida por el testimonio de dos testigos, que nadie que sinceramente le pida al Señor su salvación será rechazado por falta de fe.