Testificando a adultos jóvenes

Q

Jueves 29 de septiembre de 2022

P: Mi familia y yo estamos tratando de testificarle a un pequeño grupo de adultos jóvenes. Sus creencias actualmente son una mezcolanza de muchos puntos de vista agnósticos. ¿Nos puede brindar algunas sugerencias?

A

R: Cuando Pablo fue a Corinto, esta era una ciudad próspera. Había muchos oradores elocuentes, promoviendo una amplia variedad de creencias. Pablo sabía que tratando de debatir con ellos sus opiniones individuales era una tontera así que él resolvió “saber nada excepto a Jesucristo y a este crucificado” (2 Corintios 2:2). Ese es todavía un buen consejo. Este grupo de jóvenes adultos puede fácilmente descarrilarlos con preguntas irrelevantes si ustedes no tienen cuidado. Ustedes deben adherirse a los conceptos básicos. Todos somos pecadores y necesitamos un salvador. Por amor, Jesús estuvo de acuerdo en ser nuestro Salvador al dar Su vida por nosotros. En el tercer día Él resucitó de nuevo. Todas aquellas personas que aceptan Su muerte como pago total por sus pecados y creen que Dios lo levantó de los muertos, heredarán la vida eterna. Aquellas que no lo hagan, no la tendrán (Juan 3:16, Romanos 10:9, 1 Corintios 15:1-4).

Entonces, todo se puede resumir en cuatro preguntas a considerar:

1.- ¿Creo que soy un pecador, incapaz de salvarme a sí mismo?

2.- ¿Creo que Jesús murió por mis pecados?

3.- ¿Creo que Dios lo levantó de los muertos?

4.- ¿Aceptaría yo Su muerte como pago total por mis pecados y le pediría que sea mi Salvador?