Miércoles, 5 de julio de 2017
P: No entiendo por qué en la historia del Arca de Noé Dios destruyó todo ser viviente en la tierra excepto a ocho personas y unos animales solamente porque la gente no oraba y lo recordaba a Él. ¿Puede un Creador tener el derecho de destruir a Sus criaturas? Similarmente, ¿los padres pueden quitarles la vida a sus hijos cuando uno de ellos no los escucha o no muestra el respeto apropiado hacia ellos?
R: La justificación de Dios para destruir la Creación con el diluvio está más allá de lo que usted dice. Por ejemplo, Génesis 5:6 dice que el Señor vio cuán grande se había vuelto la maldad del ser humano en la tierra, y que toda inclinación de los pensamientos de su corazón solamente era para hacer el mal todo el tiempo.
Pero es el derecho del Creador destruir Su creación, especialmente cuando la gente se rebela en Su contra rechazando la provisión que Él les ha dado para su salvación. Estudios han mostrado que había suficiente espacio dentro del arca para albergar a cualquier persona que quisiera subir a ella, y Dios dejó la puerta abierta durante 7 días después que Noé y su familia subieron a bordo (Génesis 7:10). Pero nadie más lo quiso hacer.
Tristemente 2 Pedro 3:10 nos dice que Dios se verá obligado a destruir Su creación otra vez, por la misma razón. Y así como lo fue con el Arca, hay suficiente espacio en el Cielo para toda persona que invoque el nombre del Señor para ser salva hoy (Romanos 10:13). Pero como en los días de Noé, así será esta vez también.. Muchas personas ignorarán las señales del juicio venidero y serán destruidas.
A propósito, los padres no crean a sus hijos. El proceso de reproducción se llama procreación, lo cual significa producir descendientes, y el mismo fue delegado por Dios a la humanidad. A cambio de ello, a los padres se les da la responsabilidad de administrar a los hijos que procrean. A través de la historia el asesinato de niños ha sido un pecado que ha provocado la ira de Dios porque Él los considera como Suyos.