No fue sino hasta que Jesus rocio Su sangre en el altar del cielo para completar sus responsabilidades como nuestro Sumo Sacerdote (Hebreos 9:11-12), que el cielo estuvo restringido a la humanidad. Entonces, todas las personas que morian iban a un lugar llamado Seol en hebreo y Hades en griego. Ese lugar tenia dos divisiones, una para las personas creyentes y otra para las incredulas. Para las creyentes era un lugar de consuelo, llamado Paraiso por los griegos y el Seno de Abraham por los judios. Para las personas incredulas era un lugar de tormento. Usted puede leer una vivida descripcion de ello en Lucas 16:19-31.
El dia que murieron, Jesus le dijo al ladron que le pidio que lo recordara, que ese mismo dia estarian en el paraiso (Lucas 24:42-43). Despues de Su resurreccion Jesus se llevo a todas las personas que estaban en el paraiso al cielo (Efesios 4:8) y eso es probablemente lo que hizo que los dos lugares fueran sinonimos en el pensamiento de la primera Iglesia.