Viernes 21 de junio de 2024
P: Yo sé que la muerte de Jesús pagó el precio por mis pecados pasados, presentes y futuros. Y sé que nada de lo que he hecho o siempre haré me podrá ayudar a “ganar mi salvación”. Eso ya ha sido hecho por Jesús. Aun así, mi pregunta es esta. ¿Se enoja o molesta Dios con nosotros, personas creyentes, por cosas que hacemos o por momentos de duda? Yo sé que todo lo que tengo que hacer es arrepentirme y pedir perdón, pero aún pienso que si hacemos cosas que lo enojan, ¿nos querrá disciplinar de la manera como un padre amoroso lo haría con su propio hijo?
R: En Colosenses 1:19-20 Pablo dijo que Dios ha hecho las paces con nosotros por medio de la sangre de Jesús derramada en la cruz. Yo tomo eso como que Él ya no se enoja con aquellas personas que han aceptado la muerte de Su Hijo como pago por sus pecados.
Pero Hebreos 12:7-11 dice que debemos soportar la disciplina. Dice que Dios nos disciplina para nuestro bien para que podamos participar en Su Santidad, y así como parece ser doloroso en ese momento, produce una cosecha de justicia y paz para aquellas personas que son ejercitadas para ello.
Como usted puede ver de este pasaje la disciplina de Dios se compara con el entrenamiento. Puede ser incómodo, pero nunca se ejerce con enojo.