Domingo, 5 de octubre de 2014
Un estudio bíblico por Jack Kelley
Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores [de parto] (Mateo 24:7-8).
Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá terremotos en muchos lugares, y habrá hambres y alborotos; principios de dolores [de parto] son estos (Marcos 13:8).
Se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá grandes terremotos, y en diferentes lugares hambres y pestilencias; y habrá terror y grandes señales del cielo (Lucas 21:10-11).
La frase griega traducida “principio de dolores” también se traduce como “dolores de parto”. Por eso es que muchos eruditos le llaman a la Semana 70 de Daniel “el principio de dolores [de parto]”. Ellos dicen que las señales sobre las que Jesús estaba hablando en los versículos anteriores tenían la intención de indicar que la semana 70 había empezado. El nombre para la segunda mitad es la Gran Tribulación, la cual empieza con la abominación desoladora (Mateo 24:15-21).
Y la razón fundamental para llegar a eso es la siguiente. Los discípulos estaban preguntando por las señales del final de la era. Puesto que la semana 69 de la profecía de las Setenta Semanas de Daniel estaba finalizando, ellos querían saber cómo reconocer el comienzo de la Semana 70. Jesús acababa de decirles que el Templo sería destruido (Mateo 24:2), así que obviamente tendría que haber un retraso, porque un Templo es requerido durante la Semana 70 para que esta profecía se pueda completar (Daniel 9:24-27).
Muchos de estos eruditos también tienen la posición del rapto antes de la tribulación, así que no están de acuerdo con la opinión de que los eventos que estamos viendo en el mundo hoy día sean los dolores de parto referidos en los versículos anteriores. Ellos citan varias buenas razones para creer que la semana 70 de Daniel no ha empezado, siendo la más obvia que Israel no ha reanudado su pacto nacional con Dios y que no hay ningún Templo allí todavía.
Ellos también dicen que las grandes señales del Cielo (no en los cielos) en Lucas 21:11 se refieren a dos eventos sobrenaturales específicos. Uno es el de Apocalipsis 6:12 en el que el sol se oscurece totalmente y la luna se torna de un color rojo como de sangre, y el otro está en Mateo 24:29 en donde tanto el sol como la luna se oscurecen, y las estrellas caen del cielo. Ellos dicen que Apocalipsis 6:12 será una señal del Cielo de que la Semana 70 ha empezado y Mateo 24:29 es la señal que indica su terminación.
Yo concuerdo con esa interpretación de Lucas 21:11. Sin embargo, nunca he estado completamente convencido de que ninguno de los dolores de parto pueda empezar antes de la Semana 70, porque los dolores de parto empiezan de una manera suave e infrecuente y luego aumentan en intensidad y frecuencia. Para mí los eventos que actualmente estamos experimentando se ajustan a la descripción del Señor de los dolores de parto los cuales se están volviendo bastante frecuentes y bastante intensos.
Además, yo veo el Salmo 83, Isaías 17 y Ezequiel 38 como parte de los dolores de parto, y no estoy convencido de que tengan que suceder durante la Semana 70. De hecho, yo creo que Ezequiel 38 será el último de estos tres y es lo que llevará directamente a la semana 70, porque eso es lo hará despertar a Israel a la presencia de Dios (Ezequiel 39:22) y encenderá su deseo por un templo.
Este es el momento en el cual el endurecimiento de Israel será suavizado (Romanos 11:25). Es también cuando Dios volverá Su atención a Israel para construir un Templo allí (Hechos 15:16-18) y para que se cumpla la profecía de las Setenta Semanas. En ocasiones anteriores he expresado mi opinión de que para que se cumplan tanto Romanos 11:25 como Hechos 15:16-18 se requiere la remoción (rapto) de la Iglesia.
En resumen, entonces yo creo que actualmente estamos viendo los dolores de parto que Jesús mencionó y, mientras que hay unos más avanzados que otros, todos están en alguna etapa de llegar a la frecuencia e intensidad requeridas para provocar el cumplimiento de la Semana 70 de Daniel. Dicho eso, veamos los eventos actuales que yo creo que se encuentran dentro de la categoría de dolores de parto, para que ustedes decidan si están de acuerdo.
Se levantará nación contra nación, y reino contra reino
Nosotros vemos los problemas que Israel está teniendo con sus vecinos, la revolución en Siria, la creciente pero todavía inefectiva coalición en contra del Estado Islámico, el conflicto Ucrania/Rusia, y las guerras en diferentes países africanos, como señales de que las naciones se están levantando unas contra otras. Pero, ¿sabía usted que según el Instituto para la Economía y la Paz (IEP), el mundo como un todo se está volviendo cada vez menos pacífico desde el año 2007? El IEP monitorea 162 países alrededor del mundo y actualmente sólo 11de ellos están totalmente libres de conflictos armados internos o externos. En otras palabras todos menos 11 de estos 162 países están ya sea atacando a alguien o están siendo atacados por alguien. Se reconoce que muchos de estos involucran a movimientos separatistas o revolucionarios, o terroristas, pero si eso le parece a usted como si todo el mundo está en guerra, no está muy alejado de la realidad.
Terremotos en diferentes lugares
Casi todas las personas han admitido que los terremotos están aumentando de forma regular en años recientes.
Un nuevo estudio señala que hubo más del doble de grandes terremotos en el primer trimestre de 2014 comparado con el promedio desde 1979. La proporción promedio de grandes terremotos—aquellos mayores a una magnitud de 7,0—ha sido de 10 por año desde 1979, informa ese estudio. Ese promedio aumentó en 12,5 por año en 1992, y luego saltó a 16,7 empezando el año 2010—un aumento del 65 por ciento comparado con el promedio desde 1979. Este aumento se aceleró en los primeros tres meses de 2014 a más del doble del promedio desde 1979, informan los investigadores.
“Recientemente hemos experimentado un período que ha sido uno de los promedios más altos de terremotos jamás registrado,” dijo el autor en jefe del estudio, un geofísico con el Servicio Geológico de los EE.UU. (USGS)
Hambrunas
Las últimas estadísticas de la Organización de las NN.UU. Para la Alimentación y la Agricultura indican que cerca de una de cada ocho personas en el mundo se encuentra crónicamente desnutrida. También agrega que el mundo produce suficientes alimentos para satisfacer las necesidades de todas las personas pero muchas de ellas viven en lugares en que es difícil cultivar o no ganan lo suficiente como para comprar lo que necesitan. En algunas partes del mundo la gente ya no puede asumir que cuando se levanta por la mañana podrá tener una comida decente antes del anochecer.
Con el precio de los alimentos aumentando más rápidamente que los ingresos, más y más personas son incapaces de obtener cantidades adecuadas de comida decente en los llamados países desarrollados. Esto continuará empeorando hasta que la Biblia dice que se necesitará lo que gana una persona en un día solamente para comprar el alimento de ese día.
Pestilencia
El diccionario define pestilencia como una enfermedad epidémica mortal o virulenta. Durante los últimos años hemos tenido que enfrentar enfermedades que se ajustan a esa descripción, de una manera regular. Hasta el momento todas ellas han podido ser controladas de una forma u otra. Actualmente es el virus del ébola el que tiene la atención de todo el mundo. Abundan los peores escenarios con algunos expertos diciendo que ya es demasiado tarde para detenerlo, y prediciendo más de 1 millón de muertes en los próximos 6 meses. Otros dicen que las tácticas de miedo que se están usando al reportar eso es solamente eso, una táctica, como en los años anteriores en que la pandemia que todos temían no se materializó.
Pero Jesús dijo que la pestilencia en distintos lugares será uno de los dolores de parto. Yo creo que es demasiado temprano decir si el ébola cumplirá Su profecía en una mayor escala o no, pero si no lo hace algo más lo hará. Una cosa si es cierta: La gente en los lugares en que el ébola está suelto está experimentando pestilencia a un grado previamente desconocido, y si se extiende más puede llegar a ser un cumplimiento catastrófico de la profecía del Señor.
¿Qué está usted tratando de decir?
En resumen, de las cuatro categorías que Jesús mencionó, el conflicto entre naciones y terremotos en distintos lugares, parece que están avanzando a un ritmo constante con el hambre y la pestilencia que están todavía en etapas más moderadas. Esto nos dice que las cosas se pondrán peor.
Luego, justo al inicio de la Semana 70 de Daniel habrá una corta pausa en la cual a un mundo confiado le parecerá como si la paz finalmente ha llegado. Yo creo que a esto le seguirá el Salmo 83, Isaías 17 y Ezequiel 38 el cual será el último de los dolores de parto antes que comience la Semana 70. El pacto que será impuesto por el anticristo (Daniel 9:27) convencerá al mundo de que la guerra en el Medio Oriente es cosa del pasado. Pablo dijo que esta sería la señal más peligrosa porque haría que las personas incrédulas fueran tomadas totalmente desprevenidas.
Que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán (1 Tesalonicenses 5:3).
Los dolores de parto empezarán de nuevo y esta vez no habrá ninguna pausa hasta el nacimiento de la Era Mesiánica. Vendrán tres ciclos de juicios conocidos como la Ira de Dios, y para cuando terminen el mundo como lo conocemos estará en ruinas habiendo muerto por lo menos la mitad de sus habitantes. Jesús le llamó al último de estos tres ciclos el peor tiempo de juicio en la historia humana cual no lo ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni lo habrá (Mateo 24:21).
Dios le dijo a Jeremías que Su meta en estos juicios era la completa destrucción de todas las naciones entre las cuales Su pueblo fue esparcido, y disciplinar a Israel para prepararlo para reino venidero (Jeremías 30:11).
Pablo dijo que Jesús rescataría a la Iglesia del tiempo y del lugar de estos juicios (1 Tesalonicenses 1:10) porque no estamos puestos para sufrir la ira (1 Tesalonicenses 5:9).
En un día que nadie ha podido predecir por adelantado oiremos la voz del arcángel y el llamado de trompeta de Dios (1 Tesalonicenses 4:16-17). Antes que estos sonidos puedan quedar grabados en nuestras mentes, estaremos frente al Señor, listos para empezar nuestro viaje a la casa de Su Padre en donde Él ha estado preparando un lugar para nosotros (Juan 14:2-3). Nuestro tiempo en la tierra habrá terminado, y nuestro tiempo en la eternidad habrá empezado. Finalmente estaremos en casa. Ya casi se escuchan los pasos del Mesías. 05/10/14