¿Cómo podemos buscar nuestra salvación?

Q

Martes 2 de abril de 2024

P: El hombre está en un estado depravado y el pecado pasó de Adán a nosotros. Debido a nuestra naturaleza pecaminosa, ¿cómo podemos tomar la decisión de ser salvos sin la ayuda de Dios? ¿Es que somos tan capaces de poder hacer algo con nuestra salvación? ¿No querrá decir eso que la salvación no solamente se trata de Dios sino que es nuestras obras y Su gracia combinadas?

A

R: Romanos 8:29-30 explica el proceso y muestra que Dios está involucrado en nuestra salvación. Eso empezó antes de la creación con Su conocimiento previo de todas las personas que elegirían aceptarlo a Él durante la era del hombre. Esto muestra cómo es que nuestro nombre llegó a estar escrito en el Libro de la Vida del Cordero desde la creación de la Tierra (Apocalipsis 13:8).

Con ese conocimiento previo Él nos predestinó, lo cual significa que Él aseguraría que eso sucediera. Luego en el momento apropiado de nuestra vida Él nos llama para hacer lo que Él ya sabe que vamos a hacer. Él es persistente y se mantiene tras de nosotros hasta que respondamos, porque Él prometió que nunca nos perdería (Juan 6:39). Es como cuando usted pone la alarma de su reloj despertador porque usted tiene una reunión importante y también le pide a su cónyuge que se asegure de despertarlo. Usted toma la decisión de levantarse, pero su cónyuge estará tras de usted hasta que lo haga.

Cuando respondemos, como Él sabe que lo vamos a hacer, Él nos justifica al aplicar Su sangre a nuestros pecados, haciéndonos como si siempre hubiéramos sido inocentes. Finalmente, en el rapto/resurrección él nos glorificará. Nadie se resbala por una hendija, nadie es olvidado, nadie se queda atrás. Nosotros tomamos la decisión, pero Él sabía que la tomaríamos así que se asegura que así será.

La salvación no es trata solamente de Dios porque si eso fuera así todas las personas se salvarían (1 Timoteo 2:3-4, 2 Pedro 3:9). Pero puesto que Él ya sabía que queríamos ser salvos, Él hará todo lo que sea necesario para asegurarse de que lo seamos. Así es como Él nos ayuda.

Pero eso no es todo. Él también se asegurará de que permanezcamos salvos. 2 Corintios 1:21-22 dice que es Dios el que nos hace estar firmes en Cristo. Él nos ungió, puso Su sello de propiedad en nosotros, y puso Su Espíritu en nuestros corazones como un depósito que garantiza lo que está por venir.

Nuestra salvación no es una combinación de nuestro trabajo y Su gracia. En la Biblia el trabajo se define como algo que hacemos en un intento de ganar o de mantener nuestra salvación. Escoger ser salvos requiere que admitamos que no lo merecemos y que nunca lo podremos ganar. En Efesios 2:8-9 Pablo fue muy claro al decir que nuestra salvación es por gracia por medio de la fe, y no por obras.