El camino angosto

R: Mateo 7:13-14 dice, “Entren por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella. Pues estrecha es la puerta y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la encuentran.”

Hay varias interpretaciones de este pasaje, la mayoría tiene que ver con guardar ciertos estándares de comportamiento para calificar a la vida eterna. Pero yo estoy convencido de que esa no es la interpretación correcta.

Yo creo que el camino espacioso está lleno con la muchedumbre de ambos extremos del “cristianismo.” En un extremo se encuentran las personas que creen que Jesús solamente empezó el proceso de nuestra salvación y que nosotros tenemos que trabajar para ganar el resto y mantenerlo. Y en el otro extremo están las personas que creen que no tenemos que nacer de nuevo; que ser una buena persona, unirse a una iglesia, y ser amable con la gente es todo lo que se necesita hacer.

Pero en el camino angosto se encuentran las pocas personas que reconocen lo terriblemente pecadoras que son, y cuán cortas se encuentran de cumplir con los requisitos de Dios. Estas personas saben que no tienen nada que ofrecer a su favor y solamente pueden depender de la promesa de Aquel quien pagó la deuda por sus pecados con Su propia sangre.

Esas personas no saben cómo Él pudo haberlas salvado ni por qué Él quiso hacerlo, pero se acercan a la puerta estrecha habiendo apostado su destino eterno sobre la fe de que Él lo hizo, Cuando se acerquen a la puerta, descubrirán que está rotulada, “solamente por fe.”