El tiempo antes de la Ley

Q

Viernes 30 de agosto de 2024

P: Tengo una confusión acerca de Romanos 7:9 en donde Pablo habla sobre la edad del uso de la razón. Parece que implica que nadie moría espiritualmente antes que la ley fuera dada. Eso le daría una entrada libre a cada uno antes de Moisés y quizás a las personas en países que nunca han oído lo que las escrituras dicen sobre la Ley. ¿Puede ser cierto eso?

A

R: Como muchas personas, usted erróneamente cree que la Ley se originó en el desierto con Moisés. Pero la evidencia en Génesis muestra que Dios instituyó los sacrificios para el pecado tan pronto como fueron necesarios debido al pecado de Adán y Eva.

Al leer Génesis 4:4-7 podemos ver que tanto Caín como Abel sabían que debían presentarle ofrendas a Dios, y además sabían la clase de ofrenda que era requerida. Cuando Dios rechazó la ofrenda de Caín, Él le dijo a Caín que si hacía lo que era correcto se la aceptaría como era aceptada la ofrenda de su hermano, pero si no, el pecado estaba atisbando a su puerta.

Y de Génesis 7:2 vemos que Noé sabía la diferencia entre animales puros e impuros. En el desierto, Dios hizo que Moisés pusiera por escrito la Ley que había sido entendida por el ser humano desde el principio.

Y en Romanos 2:14-15 Pablo dijo,

Porque cuando los gentiles, que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que la ley demanda, son ley para sí mismos, aunque no tengan la ley; y de esa manera demuestran que llevan la ley escrita en su corazón, pues su propia conciencia da testimonio, y sus propios razonamientos los acusarán o defenderán.”

Entonces, ya sea que hayan oído la Ley de Moisés o no, la humanidad de manera intuitiva conoce el bien y el mal y es responsable ante Dios al llegar a la edad del uso de la razón.

Eso nos lleva de vuelta a Romanos 7:9 donde Pablo dijo,

En un tiempo, yo vivía sin la ley, pero cuando vino el mandamiento, el pecado cobró vida y yo morí.”

Él estaba diciendo que, como todos los niños, nosotros nacemos con vida eterna. Mientras él era demasiado joven para entender el propósito y el castigo de la Ley, él no era responsable por las violaciones de la misma. Una vez que llegó a la edad de uso de la razón para entenderla, él ya era responsable por la pena de sus violaciones, la cual es la muerte.

Como todos nosotros, el único remedio que él tenía era nacer de nuevo, y en ese momento sus castigos fueron transferidos a Jesús y él tenía de nuevo vida eterna (Juan 3:16).