Miércoles 25 de mayo de 2022
P: Esta pregunta la he estado pensando por muchos años. He sido un intercesor y siempre lo he considerado como un llamado del Señor para orar intercediendo por otras personas. Desde mis primeros pasos en mi caminar cristiano, entendí la importancia de la oración y he visto un gran número de oraciones contestadas. Para Dios sea la gloria por estas oraciones contestadas. Parece que yo conozco cosas acerca de una persona cuando oro por ella que no conocía antes y estoy seguro que el Espíritu Santo me revela por lo que tengo que orar en esos momentos. ¿Es este un llamado del Señor o un don del Espíritu Santo, o ambos?
R: Es ambos. La intercesión no está específicamente incluida entre los Dones Espirituales, pero es recomendada como parte de nuestra adoración.
Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad (1 Timoteo 2:1-4).
Yo creo que el Señor llama a ciertas personas de entre el Cuerpo de Cristo para asegurarse que eso suceda.
Cuando el Espíritu Santo le da a usted una información específica de cómo orar por una persona, eso es una manifestación del don de conocimiento, el cual está incluido entre los Dones Espirituales. Usted podrá encontrar la referencia en 1 Corintios 12:8.