Hágase Tu voluntad o la mía

Q

Lunes 12 de julio de 2021

P: ¿Cómo puede prevalecer el plan/voluntad de Dios cuando nosotros tenemos libre albedrío para tomar nuestras propias decisiones? ¿Cómo puede la voluntad de Dios anular nuestro libre albedrío? Nuestra hija cree que ella está en la voluntad de Dios, como sus padres, y después de orar, creemos que ella no está en la voluntad de Dios. ¿Cómo puede Dios utilizar las malas decisiones que hacemos para provocar Su voluntad en nuestras vidas?

A

R: Debido a que tenemos libre albedrío, de manera voluntaria debemos poner a un lado los planes que tenemos para nuestra vida y permitir que Dios implemente Su plan para nosotros. Eso es lo que Romanos 12:1-2 y 1 Pedro 1:13-16 están tratando de enseñarnos. El premio por hacer eso es la oportunidad de poder vivir una vida mucho más gratificante que cualquier otra cosa que podamos lograr por nosotros mismos.

La parábola del hijo pródigo (Lucas 15:11-32) tiene la intención de mostrarnos que cuando insistimos en seguir nuestro propio camino, generalmente perdemos las bendiciones que de otra manera disfrutaríamos. Dios aguarda pacientemente para que nos demos cuenta de ello y que de manera voluntaria regresemos a Él. Mientras tanto, nunca dejamos de ser uno de Sus hijos y cuando volvemos nos damos cuenta de que todo queda perdonado y olvidado, y que seremos bañados de una bendición tras otra.

Como padres de familia queremos ayudar a nuestros hijos a evitar algunos de los errores que nosotros mismos cometimos. Pero así como nosotros insistimos en tomar nuestras propias decisiones, tenemos que permitirles a ellos hacer lo mismo. Podemos pensar que al tratar de influenciar la dirección de sus vidas es un acto de amor, pero créame cuando le digo que ellos por lo general no lo toman de esa manera.