Miércoles 14 de abril de 2021
P: ¿Qué hay de una persona que una vez creyó fervientemente en Jesús, pero que ahora le ha dado la espalda completamente? ¿Cuándo ya no es solamente una cuestión de una comunión rota debido a algún pecado presente preferido, o una debilidad, sino que la persona ahora cree que el cristianismo es todo una farsa, y que ha sido engañado todo el tiempo? (Yo conozco a tal persona). ¿No aplicaría Hebreos 6 en este caso? ¿Tiene Dios responsabilidad para salvar a esa persona que ahora no quiere tener nada con Él, y de manera activa recrimina en contra de Él? ¿Qué hay del “SI” en Colosenses 1:23, “Si en verdad permanecen cimentados y firmes en la fe, inamovibles en la esperanza del evangelio que han recibido…” Eso a mí me parece que indica una condición… una condición que uno permanezca en la fe… o sea CONTINUAR CREYENDO… ¿y qué si uno ya no cree en Cristo?
R: Muchas personas se rebelan, y muchas personas hacen declaraciones emotivas de las que más tarde se arrepienten. Pero según la Biblia, ya sea que su amigo nunca fue salvo o él o ella para siempre es salvo. No es nuestra fidelidad lo que cuenta en este caso, sino es la fidelidad del Señor y Él ha prometido nunca perder a ninguno de nosotros (Juan 6:38-40).
Si usted todavía cree que Hebreos 6 se aplica a la salvación, entonces usted falló en ver el punto del artículo, cuya intención era demostrar que no se aplica a la salvación. Aún si una persona puede rechazar su salvación, usted no puede usar Hebreos 6 para respaldar eso.
La palabra griega para “si” en Colosenses 1:23 también significa siempre y cuando y con tal que, por lo que su intención no es ser condicional. Cuando el diablo dijo, “Si eres el Hijo de Dios…” en Mateo 4:3 eso no quería decir que Satanás no sabía quién era Jesús y que quería que demostrara Su identidad. Él sabía que Jesús era el Hijo de Dios y quería que Él usara Sus poderes para terminar Su ayuno. Mateo usó la raíz de la misma palabra que Pablo usó en Colosenses 1:23.
Y en la carta a los Efesios Pablo escribió que el Espíritu Santo está sellado en nosotros como un depósito que garantiza nuestra herencia (Efesios 1:13-14). Entonces la idea de Pablo en Colosenses fue transmitir la idea de “puesto que” en el versículo 23, en lugar de “si”.