Viernes, 16 de junio de 2017
P: Mi pregunta es, ¿por qué Dios se enojó tanto con los amigos de Job? Yo encuentro que lo que dijeron de Dios ayudó mucho y fue bueno. ¿Qué fue lo que no estuvo correcto en sus discursos que enojó a Dios? ¿Y por qué Él elogió a Job al final al contrario a sus amigos?
R: Lo que molestó a Dios acerca de los tres amigos de Job es que ellos lo tergiversaron completamente. Sus argumentos fueron desde la posición humanista basada en la experiencia humana, la tradición humana y el mérito humano. Su lógica era falsa y sus conclusiones estaban equivocadas. Ellos creían que el hombre debe hacer las cosas para ganarse el favor de Dios y por consiguiente, debe sufrir como una señal del desagrado de Dios.
Mientras que ellos estaban en lo correcto al aseverar que el pecado era la raíz del problema de Job, Elifaz creía que Dios estaba castigando a Job por no hacer suficientes cosas buenas, y Bildad creía que Job solamente estaba quejándose porque quería que Dios le devolviera su riqueza. Por otro lado, al justificarse a sí mismo, Job estaba condenando a Dios de ser injusto.
Es importante recordar que estos tres hombres estaban equivocados en sus argumentos. No fue sino hasta que Eliú llegó que nosotros empezamos aprender la verdadera naturaleza de Dios. En el capítulo 34 él confirmó la incapacidad que tiene Dios de hacer el mal o de pervertir la justicia, y en el capítulo 35 Eliú dijo que nuestras buenas obras no le ayudan a Dios en nada y que todos nuestros pecados no lo hacen a Él perder nada. Solamente nos afectan a nosotros y a quienes nos rodean.
Luego en el capítulo 38, cuando el mismo Dios se unió a la conversación, vemos que Job no fue acusado ni tampoco considerado inocente, sino que su entendimiento de Dios fue lo que se cuestionó.
Finalmente en el capítulo 42 Job de arrepiente, confiesa y fue restaurado. Su conocimiento de Dios se trasladó de su cabeza a su corazón y pudo entender, y de esa manera estuvo en una posición para poder interceder por sus amigos.