Martes 7 de julio de 2020
P: Más y más cuando comparto mi fe la gente me dice cosas como éstas, “Yo veo que eso funciona para usted,” o “Su manera funciona para usted y la mía para mí.” No creen que solamente haya un camino para llegar a Dios y que la verdad sea subjetiva. Aún he tenido a personas que me dicen, “Bien para ti,” cuando comparto lo que creo. La única vez que hago que se pongan erizos es si hablo acerca de la verdad absoluta y desafío sus creencias de que hay más de un camino para llegar a Dios. Ya no he vuelto a hacer eso porque no he podido conseguir nada. Estoy perdido. ¿Cómo les atestiguo a esas personas?
R: Como usted puede darse cuenta, yo no soy un aficionado al testimonio no solicitado, especialmente cuando eso genera resistencia. Las respuestas que usted está obteniendo de las personas son formas amables de decirle a usted que no están interesadas. Yo creo que usted debe terminar la discusión allí y seguir hacia adelante hasta encontrar a alguien que quiere oír más, como el Señor les aconsejó a Sus discípulos en Mateo 10:14.
Piense en sus esfuerzos como que está sembrando semillas en vez de estar cosechando. Hecho correctamente, la semilla que usted siembre en el presente puede crecer hasta ser una floreciente fe en el futuro.
Por otro lado, confrontar a las personas solamente las polariza y lo más seguro es que las haga menos receptivas al Evangelio en el futuro.