Un Comentario Bíblico por Jack Kelley
Por tanto, varones burladores que gobernáis a este pueblo que está en Jerusalén, oíd la palabra de Jehová. Por cuanto habéis dicho: Pacto tenemos hecho con la muerte, e hicimos convenio con el Seol; cuando pase el turbión del azote, no llegará a nosotros, porque hemos puesto nuestro refugio en la mentira, y en la falsedad nos esconderemos.
Por tanto, Jehová el Señor dice así: He aquí que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure.
Y ajustaré el juicio a cordel, y a nivel la justicia; y granizo barrerá el refugio de la mentira, y aguas arrollarán el escondrijo. Y será anulado vuestro pacto con la muerte, y vuestro convenio con el Seol no será firme; cuando pase el turbión del azote, seréis de él pisoteados. (Isaías 28:14-28)
La primera vez que escribí sobre este pasaje fue hace casi seis años. En aquel entones Israel se encontraba en proceso de entregar la Franja de Gaza con la esperanza de acercarse más a la paz con los palestinos. Desde entonces las cosas han ido empeorando para el pueblo judío. Cada esfuerzo que han hecho para acomodarse a la opinión mundial los ha dejado cada vez más débiles, mientras que sus enemigos están cada vez más fuertes.
Conforme leo los reportajes sobre la situación actual de Israel, las palabras de Isaías aún me vienen a la mente. Algunas personas creen que en sus profecías Isaías estaba enviándole al Reino del Sur tres mensajes simultáneos. El primero tenía que ver con el tiempo cercano y les advertía del juicio venidero por manos de los babilonios. Este juicio sería similar al que el Reino del Norte estaba por recibir por parte de los asirios. El segundo mensaje se relacionaba con el tiempo que rodeaba la primera venida del Mesías, y el tercero describía los eventos del final de la era. Los eruditos que sostienen este punto de vista alegan que en algunos lugares Isaías se refiere a estos tres márgenes de tiempo a la vez. Entonces, Isaías 28:14-18 es uno de ellos.
¿De Qué está Hablando Isaías?
El significado del pasaje es claro. Al estar haciendo alianzas con los países comprometidos a su destrucción, los israelitas estaban engañándose a sí mismos al creer que serían exentos de los planes de expansión y conquista que esos países tenían. En verdad, las políticas de apaciguamiento de Israel generarían acuerdos basados en ilusiones que pronto serían rotas cada vez que el enemigo lo veía conveniente. Eso demostró ser cierto con los asirios, los babilonios, los sirios en tiempos de Grecia, los romanos, y últimamente los “palestinos”. Esta política finalmente culminará en la máxima decepción. Un tratado con el anticristo casi los llevará a la ruina.
El Señor hizo que Isaías le advirtiera a Su pueblo que solamente había un hombre en el mundo en quien podían confiar, y ese era su Mesías. Solamente Él los trataría justa y rectamente. Todos los demás, aún sus supuestos amigos, les mentirían para ajustarse a sus propios intereses, los cuales siempre serán contrarios a los de Israel.
Aquellos de nosotros con un trasfondo bíblico y un entendimiento profético, observamos en abierta consternación cómo los líderes actuales de Israel se inclinan ante la presión y los planes internacionales una vez más, para desalojar a su propio pueblo de la tierra dada por Dios, explicando que al hacerlo están obteniendo paz con sus vecinos. Pero aun aquellas personas sin ese entendimiento solamente necesitan repasar las recientes acciones de los amigos y enemigos de Israel para obtener una visión clara del futuro.
Irán se mantiene acelerando el paso de su programa nuclear, al haber dejado de fingir de solamente querer una fuente adicional de energía doméstica, mientras que repiten su determinación de borrar a Israel de la faz de la Tierra. Un creciente consenso entre los generales comandantes de Israel ha dado como resultado una petición pública para que se les autorice atacar Irán y destruir su capacidad nuclear antes que sea demasiado tarde.
Al mismo tiempo, la presente revuelta civil en Siria ha dejado a Líbano bajo el completo control de Irán con Hesbolá como un socio más que deseado. El archienemigo se mantiene sereno en la frontera de Israel. Y en el sur Irán está formando a los soldados de Hamás en un ejército de comandos disciplinados, listos para atacar. Los ataques con cohetes y morteros aumentan cada día.
En mayo de 2011 el Presidente Obama de los EE.UU. sugirió que cualquier convenio entre Israel y los palestinos lo más seguro se haría con las fronteras que Israel tenía antes de 1967. El mundo saltó por esta declaración y aunque él trató de retractarse unos días más tarde, nadie escuchó. Yo no creo que eso fue accidental. Yo pienso que el Presidente Obama estaba deliberadamente haciendo que esa fuera la postura oficial de la política de los EE.UU. Desde entonces el mundo ha estado ejerciendo una presión insoportable sobre Israel para que acepte eso también.
Habiendo rechazado inicialmente la posición de Obama en términos muy fuertes, recientemente el Primer Ministro Israelita Netanyahu pareciera estar listo a aceptar esa propuesta, con dos condiciones. Él no aceptaría una Jerusalén dividida y expresó que los palestinos deben de reconocer a Israel como un Estado Judío.
¿Qué tan ciego necesita ser uno para no ver la escritura en la pared? Yo creo que esta meta es hacer que Israel quede completamente indefenso, obligándoles a depender de la comunidad internacional para su protección. Sólo observen la creciente presión para que eliminen la valla de seguridad seguida de llamados para su desarme nuclear, y todo en nombre de la paz. (Recuerden, Ezequiel 38:11 describe a Israel como una tierra con ciudades sin muros justo antes del ataque sorpresa de la coalición musulmana.)
¿A Quién Vas a Llamar?
En última instancia, Israel va a poner toda su esperanza de protección en un hombre, al que llamamos el anticristo. Un corto tiempo después que la coalición musulmana guiada por Irán y armada por Rusia toma ventaja de la descuidada suposición de Israel de que la paz ha llegado, y hace un inmenso ataque sorpresa, él impondrá un pacto de siete años el cual incluye las provisiones para construir un Templo en Israel (Daniel 9:27). Israel va a querer un Templo para entonces porque se dará cuenta que Quien hizo huir a los ejércitos atacantes fue el mismo Dios. El Antiguo Pacto, olvidado por tanto tiempo, será renovado por sus últimos siete años. Pero aun así, aceptarán al falso mesías que viene en nombre propio, al haber rechazado al Verdadero quien vino en nombre de Su Padre (Juan 5:43) y el resultado casi los destruirá.
A la mitad de los siete años su supuesto benefactor hará la traición óptima y proclamará ser su Dios (2 Tesalonicenses 2:4), y se propondrá destruir hasta al último de ellos. Lo hará desde el mismo Templo que ayudó a construir, para luego traer todos los recursos militares de cada nación de la Tierra en contra de ellos. Traicionados por los amigos y acosados por sus enemigos, los israelitas no tendrán a nadie a quien volverse y con Jerusalén rodeado y la mitad de la ciudad tomada, parecerá que el fin está finalmente sobre ellos.
“Venid y volvamos a Jehová, clamarán; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará. Nos dará vida después de dos días; en el tercer día nos resucitará, y viviremos delante de él.”
“Y conoceremos, y proseguiremos en conocer a Jehová; como el alba está dispuesta su salida, y vendrá a nosotros como la lluvia, como la lluvia tardía y temprana a la tierra.” (Oseas 6:1-3).
Y su Mesías, Jesús, Quien ha estado esperando durante 2000 años para que ellos digan eso, responderá: “Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito” (Zacarías 12:10)
“En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén, para la purificación del pecado y de la inmundicia” (Zacarías 13:1)
“Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla. Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur” (Zacarías 14:3-4)
“Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre” (Zacarías 14:9). Aquel que es fiel y verdadero habrá cumplido todos Sus compromisos para con ellos, y como Rey de toda la tierra Él tendrá el poder para hacerlo cumplir.
Si usted es como yo, usted debe de afligirse sobre el clamor presente del pueblo de Dios. Sepa que el Señor también se aflige. Sepa también que conforme las condiciones se empeoran cada vez más para ellos, su victoria y la nuestra está impresionantemente más cercana. Porque no se adormecerá ni dormirá Aquel que guarda a Israel, y siempre está alerta por cualquier señal de que Su pueblo está listo para regresar a Él.
Mientras tanto, el Salmo 122:6-7 nos instruye sobre la respuesta apropiada a los eventos de nuestro tiempo. “Pedid por la paz de Jerusalén; sean prosperados los que te aman. Sea la paz dentro de tus muros, y el descanso dentro de tus palacios”. Si escucha cuidadosamente, ya casi se oyen los pasos del Mesías. 6/8/11