Yo no quise dar a entender que todas las adicciones son pecados que nos asedian, o el hecho de que usted ha estado batallando durante anos con algo, sea eso una evidencia de que usted no puede vencerlo. Su ejemplo del locutor deportivo alcoholico es un ejemplo de ello. Tampoco los pecados que nos asedian son adicciones. Cualquier pecado que parece que no podemos conquistar puede ser un pecado que nos asedia.
Finalmente, en Hebreos 12:1 el escritor dijo, «Por tanto, tambien nosotros, que estamos rodeados de una multitud tan grande de testigos, despojemonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia, y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante.» La frase «una multitud tan grande de testigos» se refiere a los grandes hombres y mujeres de fe que el reconocio en Hebreos 11, e indica que sacando fuerza del ejemplo de su fe, y con perseverancia de nuestra parte, aun los pecados que nos asedian pueden ser vencidos. Leyendo Hebreos 11:2-3 nos ayudara a recordar de donde viene nuestra fe para que no desanimarnos.
En todo esto, es importante recordar que todos los pecados de nuestra vida fueron perdonados en la cruz, y cuando usted le pide la salvacion, el Senor lo acepta tal y como usted es. El entonces cuenta la muerte de Su Hijo como el pago completo de todos sus pecados para que ante Sus ojos usted sea ahora una nueva creacion en Cristo (2 Corintios 5:17), con una justicia de Dios que viene por medio de la fe a todos aquellos que creen (Romanos 3:21-24), y no debido a nuestro comportamiento. Conquistar el pecado en nuestra vida es la forma de darle a El las gracias por habernos salvado.