Jueves, 25 de septiembre de 2014
Un Estudio Bíblico por Jack Kelley
Si ustedes creen como yo que la Biblia enseña que el Rapto de la Iglesia sucederá antes que la Semana Setenta de Daniel comience entonces sin duda alguna ustedes han pensado qué les sucederá a las personas entre sus amistades y familiares que lo van a perder. ¿Tendrán otra oportunidad de salvarse?
Los que se pierden
Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia (2 Tesalonicenses 2:7-12)
Aquí Pablo declara que la Iglesia tiene que haberse ido antes de que el anticristo sea oficialmente revelado, porque el Espíritu Santo quien obra a través nuestro es el que está deteniendo el poder secreto de la iniquidad. Las personas que se pierden creerán la mentira de que el anticristo es el que Dios envió para gobernar el mundo. Pablo enseñó que Dios realmente las ayudará a que lleguen a esta falsa conclusión porque estas personas habrán rehusado creer la verdad para ser salvas. Por eso es que se están perdiendo.
A primera vista este pasaje parece decir que no habrá una segunda oportunidad y que el momento para creer la verdad salvadora ha terminado con el Rapto. La palabra griega traducida rehusar literalmente significa que no aceptaron la verdad. Eso implica que la verdad les fue presentada y que la rechazaron.
Pero esto realmente no termina de responder la pregunta. ¿Tienen estas personas que oír el Evangelio para rechazarlo de manera consciente para que sean contadas entre las que se están perdiendo, o su fracaso en dar una respuesta afirmativa será el resultado de un rechazo por defecto? ¿Todas las personas que se quedaron después del Rapto se contarán entre las que se pierden, o habrá quienes no se perderán?
Sin meternos en los matices del idioma griego, veamos si hay otros lugares en las Escrituras que nos puedan ayudar a encontrar más de una respuesta. Lo más lógico de hacer es ver si podemos encontrar alguna evidencia convincente de que los gentiles pueden salvarse después del Rapto. Yo asumo que ustedes saben que muchas personas judías serán salvas durante la Semana Setenta porque ese es uno de sus objetivos.
Cuando empieza la Semana Setenta de Daniel Dios, una vez más, va a enfocarse en Israel. De Daniel 9:24-27 podemos ver que Él tiene asuntos pendientes con Su pueblo. Algunas de las cosas que Él prometió hacer a través de ellos en el versículo 24, simplemente no se han llevado a cabo todavía. La rebelión de Israel en contra de Dios no ha terminado, la justicia perdurable no ha llegado, hay cientos de profecías de la Segunda Venida que permanecen sin cumplirse aún, y el Lugar Santo no ha sido ungido. Ninguna de estas cosas involucra al mundo en general. Todas se refieren al pueblo de Daniel, los judíos, y la Ciudad Santa de Daniel, Jerusalén.
¿Qué será de los gentiles?
Pero en nuestro estudio de Hechos 15 (Artículo ‘El Rapto Antes de la Tribulación en Hechos 15:13-18’, 8 de Octubre de 2011) vimos que una de las cosas que Dios va a hacer mientras restaura a Israel después del Rapto, es proveer una vía para que el remanente de las personas, incluyendo los gentiles, lo busquen a Él (Hechos 15:17).
La evidencia de que esto es cierto se encuentra en Apocalipsis 7:9-17 que describe a una multitud de creyentes de después del Rapto los cuales nadie podía contar, de toda nación, tribu, raza y lengua que llegan al Cielo. Esto nos dice que muchas personas de entre esos creyentes serán gentiles, salvados de la Semana Setenta de Daniel antes de que comience la Gran Tribulación.
Algunas personas dicen que este grupo es la Iglesia y colocan el Rapto aquí, entre el sexto y séptimo juicio de los sellos, pero estas personas no pueden estar en lo correcto. En primer lugar Juan, el discípulo que era el más cercano a la Iglesia, no los reconoce. Pero yendo más al punto, su destino no es el mismo que el de la Iglesia. Están ante el trono de Dios, pero no están sentados allí con Jesús como lo estará la Iglesia (Efesios 2:6). Le servirán a Él día y noche en Su Templo, pero no reinarán con Él ni tampoco serán llamados reyes ni sacerdotes.
Yo creo que esta gran multitud de creyentes habrá llegado a la fe principalmente debido al Rapto. Habrán oído el Evangelio pero no lo aceptaron ni lo rechazaron, sino que pospusieron su decisión hasta que ya fue demasiado tarde. El Rapto habrá removido el último obstáculo para su conversión, confirmándoles que tanto usted como yo estábamos en lo correcto cuando tratamos de decírselos.
Esta es la evidencia de personas gentiles siendo salvas después del Rapto. Pero antes de que ustedes se sientan muy cómodos con esto como que es un plan de contingencia para sus amistades y familiares, recuerden que para poder llegar al Cielo habrán tenido que morir en la Tierra. Ellos serán algunos de los primeros mártires de la Semana Setenta de Daniel. Esperar hasta después del Rapto para salvarse no será como quien espera el próximo autobús. Estas personas tendrán que soportar muchísimo más para recibir mucho menos.
Algunas personas se han puesto a pensar cómo es que una multitud tan grande de gente pueda morir nomás empezando la Semana Setenta, antes que el anticristo pueda establecer sólidamente su gobierno mundial y antes de que sea habitado por Satanás. La Biblia no lo dice, pero yo creo que eso puede ser el resultado de una reacción violenta en contra de las personas creyentes después del Rapto.
Profecías de otras religiones nos dicen que la mayoría del mundo por intuición sabe sobre los juicios venideros. El Rapto será la evidencia incontrovertible de que Dios está listo para venirse duramente con esos juicios. La represalia en contra de estos nuevos cristianos, porque esas personas están enojadas con Dios por haber hecho lo que en realidad dijo que haría, puede ser una de las fuerzas motivadoras detrás de esas masacres masivas.
Algunas personas de la Nueva Era dicen que el mundo se encamina hacia su último salto en la evolución. Es un salto espiritual que marcará el comienzo de una paz y armonía mundiales. Estas personas dicen que los cristianos nacidos de nuevo y los judíos ortodoxos están deteniendo esto al mantenerse ceñidos a la anticuada noción de que solo hay un Dios Creador por lo que tendrán que ser primero quitados de en medio. Generalmente comparan la remoción de la Iglesia con la remoción quirúrgica de un peligroso cáncer que amenaza la vida de un cuerpo que de otra manera sería sano.
Por consiguiente, otra razón de la furia que muchas personas van a sentir es que cuando pensaban que ya se han librado de todos esos molestos cristianos, despejando así el camino para la vida utópica de sus sueños, sale un nuevo tropel de personas para arruinarles las cosas. Recuerden, el Espíritu Santo que es la fuerza que ha detenido el mal durante todos estos años habrá terminado. “Maten a los Cristianos” puede convertirse en el grito de guerra del mundo no salvo.
Esta matanza de creyentes pronto será vista como un acto de misericordia de Dios porque ciertamente no todos los creyentes de después del Rapto serán inmediatamente muertos. Otros se enfrentarán a años de sufrimiento empezando con los terribles eventos tanto naturales como sobrenaturales que envenenarán el aire y el agua, incluyendo el ataque agonizante de las langostas demoníacas que hará que las personas busquen morir para ser liberadas de eso (Apocalipsis 9:1-6). Una tercera parte de la humanidad morirá solamente a causa de estos juicios (Apocalipsis 9:18).
Recuerden, la Gran Tribulación no habrá empezado todavía. Tampoco esto será la última oportunidad para que los gentiles de después del Rapto se salven. Apocalipsis 14:6-7 habla de otro altar mundial justo antes que empiece la Gran Tribulación.
Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, diciendo a gran voz: Teman a Dios, y denle la gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adoren a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas
Esta oportunidad llegará justo después que la marca de la bestia sea introducida, y será seguida por una advertencia de que el ponerse la marca resultará en la separación permanente de Dios y una garantía de una eternidad de sufrimiento (Apocalipsis 14:9-11). Los juicios de la Gran Tribulación serán tan severos que si siguen su curso nadie podrá sobrevivir. A causa de los elegidos, el Señor les pondrá fin después de 3½ años, pero durante ese tiempo un número no especificado de nuevos creyentes morirán decapitados por haber rehusado ponerse la marca. Todas estas personas serán resucitadas al momento de la Segunda Venida (Apocalipsis 20:4).
Me Alegro Que Haya Terminado
Se ha estimado que cerca de la mitad de la población del mundo post rapto sobrevivirá hasta el final. Pero durante los juicios cara-a-cara que le siguen a la Segunda Venida el Señor encontrará personas creyentes entre los sobrevivientes, tanto judíos como gentiles. A pesar de haber sido totalmente excluidas de los niveles básicos de la sociedad y del interminable temor de ser capturadas y muertas, estas personas vivirán para poder estar ante Su presencia y recibir su recompensa.
Las parábolas de Mateo 25 describen esto y el juicio de las ovejas y las cabras es claramente sobre los sobrevivientes gentiles (Mateo 25:31-46). Aquellas personas que han demostrado su fe por sus acciones serán bienvenidas en el Reino. Ellas son las que repoblarán la Tierra.
Entonces aquí tenemos tres referencias de personas creyentes post rapto. Quizás algunas de sus amistades y familiares presentes se encontrarán entre uno u otro de estos grupos post rapto. Si eso es así, las que no sean martirizadas antes, tendrán que soportar un tiempo el cual usted no le desearía ni a su peor enemigo. Jesús dijo que este sería el tiempo más terrible que jamás vendría sobre la humanidad (Mateo 24:21). Y también les ruego que no adopten una actitud fatalista sobre ellas, y que no se resignen a la salvación post rapto para ellas.
Pero si ustedes las están golpeando en la cabeza con el Evangelio, ya no lo hagan más. Eso no funciona. La mejor estrategia que pueden seguir es una estrategia doble. Oren por su salvación con la misma intensidad con la que ustedes oran por la recuperación de una enfermedad seria. Y muéstrenle los beneficios de ser una persona creyente al permitir que la fe inquebrantable de ustedes sea un faro de luz de esperanza en este oscuro y moribundo mundo. Nada más será tan efectivo. No tenemos mucho tiempo disponible, así que si aún no han empezado ahora es el momento. Ya casi se escuchan los pasos del Mesías. 10/08/13