Martes 20 de septiembre de 2022
P: Leí su respuesta a la pregunta titulada “Trabajando en nuestra salvación” y me quedé pensando en algo. Cuando usted dijo:
“Debemos buscar ser más como Cristo en nuestra manera de vivir, y no para ganar algo, puesto que ya lo hemos recibido, sino más bien permitirle a Dios que trabaje en nosotros según Su propósito.”
Yo creo que usted está equivocado. Estoy de acuerdo con usted en que no debemos tratar de “ganar” nuestra salvación, porque la salvación se obtiene solamente por fe. Sin embargo, en nuestro diario caminar (o competencia como lo pone Pablo) estamos tratando de ganar nuestras coronas, o tesoros en el Cielo, y todas las demás cosas gloriosas prometidas por nuestro Salvador. Así que mientras que la Biblia es clara en que no podemos ganar nuestra salvación, cuando Pablo habla de ganar algo, él está hablando sobre recompensas, no nuestra salvación, o por lo menos eso es lo que yo creo. A ese respecto yo creo que estamos tratando de ganar algo en el Cielo. ¿Qué piensa usted?
R: Técnicamente usted está en lo correcto, pero no es tan simple como suena. A nosotros se nos dan coronas como recompensa por cierta clase de comportamiento, pero solamente si nuestros motivos son puros (1 Corintios 4:5; Hebreos 4:12). La ganancia personas no es un motivo aceptable, y tan pronto como empezamos a tratar de ganar nuestras coronas nos descalificamos a nosotros mismos. El único motivo aceptable es la gratitud a Dios por lo que ya se nos ha dado, y eso es el regalo gratuito de la salvación. Cuando nuestros motivos son aceptables, Dios nos recompensa con coronas.
Esa es la misma razón por la que dar esperando recibir no funciona, porque aquí el motivo es avaricia. Usted tiene que dar en agradecimiento por lo que ya ha recibido, sin esperar ninguna ganancia futura, para que su donación sea aceptable cuando usted lo hace, y así Dios tiene la libertad de bendecirlo porque los motivos que usted tiene son puros y de esa manera usted termina recibiendo más de lo que ha dado.
Entonces, mantengo la posición de lo que expresé.