Eso quiere decir que debemos responder a Su motivacion y obrar en Su poder para producir fruto para el Reino. Trabajando por nuestra propia iniciativa y en nuestra propia fuerza, no importa lo exitosos que parezcamos ser, no podremos producir nada para el Reino. Esa obra es como las ramas marchitas que se queman en el fuego.
Yo creo que 1 Corintios 3:10-15 nos da la misma idea. Algo de nuestras obras es como oro, plata y piedras preciosas, que son de gran valor para el Reino. Otras obras con como madera, heno y hojarasca, que no tienen valor alguno. Juan 15:5-6 nos dice que la diferencia es si lo que hicimos fue hecho bajo la iniciativa del Senor y en Su poder, o si lo fue por nosotros mismos.
Puesto que el juicio de nuestras obras se llevara a cabo en el cielo despues del rapto, no podremos ser alejados para ser purgados o limpiados. Ya estaremos en cuerpos glorificados que son perfectos. Ninguna parte de nuestro yo terrenal permanecera. Este juicio es solamente con el proposito de calificarnos para recibir las recompensas. Y como Pablo dijo en 1 Corintios 3:15, aun si todas nuestras obras son quemadas en el fuego del juicio, todavia seremos salvos.
Asi que usted esta en lo correcto, eso parece ser otra ensenanza incorrecta, algo llamado la teoria de los vencedores.